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Consejos para mantener tus utensilios de cocina como nuevos

En Recetas Nestlé® te enseñamos a cuidar de tus utensilios de madera, acero, silicona y cristal

Jue, 09/09/2021

Cuando se habla de la cocina, los temas dominantes suelen ser la comida y las recetas, pero no siempre sale a la luz la importancia de la higiene. No sólo es fundamental para mantener los alimentos bien cuidados, también es muy importante saber cuidar los distintos utensilios de cocina.

Vale la pena tener en cuenta que, dependiendo de los materiales, las recomendaciones cambian. Es decir, el cuidado de los platos de madera no es el mismo que el de los elementos de cristal o utensilios de acero.

Utensilios de cocina de acero: ¿cómo conservarlos?

Una situación que seguramente has vivido es la comida pegada en tu olla de acero. Es un gran utensilio que te permite cocinar a altas temperaturas sin dañarla, pero también debes tener cuidado de no rayarla y evitar que la comida se pegue, que podría terminar con manchas.

Más allá de hablar de ollas, cacerolas o sartenes de acero, el cuidado y mantenimiento es el mismo.

Aunque no sucede con todos los materiales, procura limpiar las sartenes apenas dejen de estar calientes, para evitar que la comida se quede mucho tiempo y se pegue.
Nunca le eches agua fría a los sartenes que aún están calientes.
Lávalas con un jabón o un detergente que no sea muy fuerte, usando una esponja suave para no rayarlas.
Límpialas también por fuera, no únicamente por dentro, para que no nazcan manchas.
Sécalas con un pañuelo cuando termines de lavarlas para evitar que se formen manchas.
Procura cocinar con fuego medio o bajo. Si vas a hacerlo con fuego alto, asegúrate de saber lo que estás haciendo.
Jamás cortes alimentos dentro de las ollas, te arriesgas a rayarlas.

¿Cómo quito la comida que se quedó pegada?

Antes de perder la paciencia y comenzar a rayar los sartenes, déjalos remojar en agua caliente. Si después de esto sigue estando la comida incrustada, intenta usar un cepillo o una esponja más dura (pero que no sea de metal) para quitarla.

¿Qué hacemos con las manchas quemadas?

Una cosa es sacar la comida que se quedó pegada, pero otra es limpiar las quemaduras. Lo que puedes hacer es pasar un limón partido por toda la olla o sartén, lo cual ayuda a suavizar las manchas quemadas.

Cuidados de los platos

Una montaña de platos en casa, llenos de grasa y con restos de comida pegados, parece una imagen de una película de terror culinaria. Lo más aterrador es que ocurre frecuentemente desde que pasamos la mayor parte del tiempo en nuestros hogares debido a la pandemia.

Por otro lado, también se gasta muchísima agua en este proceso y todavía hay bastantes dudas sobre los beneficios de un lavavajillas. Acá te resolvemos algunas para que tus platos siempre estén relucientes y sepas cómo debes cuidarlos.

Utiliza agua caliente

El agua fría no acaba con todas las bacterias que pueden estar en los platos, y tampoco ayuda a quitar la comida que está pegada. En cambio, si los lavas con agua caliente, estos restos se van a suavizar y serán más fáciles de limpiar.

De hecho, en una entrevista con el periódico La Vanguardia, la profesora Cristina Cusí de la Escuela Superior de Hostelería de Barcelona, afirmó que lo ideal para eliminar las bacterias es usar agua a 80°C.

Un hombre lavando utensilios de cocina

Fíjate primero en la grasa

Un error muy común es lavar todos los platos al mismo tiempo, sin pensar en el tipo de suciedad. Por ejemplo, si tienes un plato con grasa de carne y uno en el que serviste la ensalada, una vez los estés fregando, el primero va a terminar engrasando al segundo.

Es importante que mires cuáles son los platos con grasa, para quitarla primero con una servilleta o un trapo.

Lava en el momento

A todos nos ha pasado. Terminamos de comer en la noche, ya sea con la familia o una reunión de amigos, llevamos los platos de vuelta a la cocina y decidimos lavarlos el día siguiente.

Cuando el sol vuelve salir, nos levantamos a lavar y los restos de la comida están duros, secos y pegados.

Por eso es recomendable limpiar los platos después de usarlos. Es muchísimo más fácil quitar la comida y la grasa. En el caso de que sea imposible hacerlo, al menos tenemos que dejarlos en remojo con un poco de detergente.

De esta forma, al día siguiente la tarea será mucho más fácil y no vas a tener el riesgo de rallar la vajilla.

¡Cambia tus esponjas viejas!

Ya sean las esponjas tradicionales o las de metal, estos objetos son el lugar perfecto para que las bacterias se acumulen. Y si quieres que tus platos y los otros utensilios se vean como nuevos y estén realmente desinfectados, no es la mejor idea que los laves con unas esponjas que tienes hace meses.

No utilices un balde para enjuagar

En algunos hogares no es nada extraño que después de lavar los platos con jabón o detergente, se enjuaguen en un balde o cualquier otro recipiente con agua. Aunque esto ayuda a ahorrar, en términos de limpieza no es la mejor idea, ya que la suciedad se acumula.

Utensilios de cocina de madera

Cómo cuidar los utensilios de cocina de madera

Debido a su material, los platos de madera tienen algunas consideraciones adicionales. Primero, lávalos a mano en lugar de usar el lavavajillas y siempre pásales una toallita cuando termines, para secarlos y evitar la humedad que podría afectar la madera.

También ten cuidado con el sol, ya que si los dejas mucho tiempo expuestos pueden generar manchas o un cambio de color que haga que se vean más gastados.

Lavar materiales de madera

Al igual que los platos, no los lleves al lavavajillas, ya que las altas temperaturas pueden dañar la madera. También evita detergentes que sean muy fuertes, en cambio, frota medio limón o utiliza su jugo.

Lo ideal es lavarlos con agua caliente, así que utiliza unos guantes para no quemarte. De todas formas, es muy normal que con el paso del tiempo los utensilios de cocina de madera se vean gastados y viejos, pero para devolverlos a sus mejores días hay un par de trucos.

Vinagre: llena un recipiente con vinagre y deja tus instrumentos de cocina sumergidos por media hora. Después lávalos con agua caliente y sécalos.
Agua hirviendo: pon a hervir agua y luego viértela en un frasco o cualquier otro recipiente que esté totalmente limpio. Coloca el utensilio en el agua, al poco tiempo verás la suciedad acumulada desprendiéndose. Te recomendamos dejarlo unos 20 minutos y después secarlo muy bien.

Recetas recomendadas

Ayuda con los utensilios de silicona

Son muy comunes en la repostería y, debido a la variedad de colores que ofrecen, para cocinar con niños. Los utensilios de silicona son realmente fáciles de limpiar y mantener en un buen estado, ya sea a mano o en el lavavajillas.

Limpiar a mano: usa agua caliente y una esponja suave para evitar que terminen con arañazos. Ten precaución al dejarlos remojando en jabón o detergente, no vas a querer que terminen con ese olor y, mucho menos, con ese sabor.
En el lavavajillas: los utensilios de silicona no tienen problemas con las altas temperaturas de un lavavajillas, pero es importante que limpies los restos de comida que queden pegados antes de llevarlos a lavar.
Cómo quitar los malos olores: es común que esto suceda con los utensilios de silicona. Para arrancar esos aromas, déjalos remojando en agua con bicarbonato de sodio y luego lávalos.

Cuidado con la cristalería

Hay eventos que merecen sacar las buenas vajillas y darnos un lujo a la hora de comer. Pero como la cristalería no suele usarse a diario, seguramente está algo empolvada y con poco brillo.

La solución es muy sencilla. Primero, pon una toalla o un trapo en la base del fregadero, si se te llega a resbalar algo, lo último que queremos es que se rompa. Después limpia la cristalería con una esponja suave, que no vaya a dejar rayones. Refriega con agua caliente y jabón, y quedarán como nuevas.

Fuentes:

Preguntas frecuentes

Para mantener nuestros utensilios de cocina en buen estado, es importante lavarlos a mano con agua tibia y jabón suave, evitando el uso de abrasivos que puedan dañarlos. Además, es recomendable secarlos por completo después de cada uso.

Lo ideal es almacenar los utensilios de cocina en un lugar seco y bien ventilado, preferiblemente colgados en ganchos o en organizadores para evitar que se golpeen o rayen entre sí. También es importante mantenerlos separados según su función.

Para prevenir la oxidación en utensilios de metal, es importante secarlos completamente después de lavarlos y aplicar una capa delgada de aceite vegetal en su superficie antes de almacenarlos.